Crónica de GUN, siempre intensos, en Madrid

Jun 11, 2024 por Red Hard´n´Heavy en Conciertos

Hace unos días volvimos a ver a GUN en Madrid, en día de San Isidro (miércoles festivo en la capital) y con uno nuevo show potente y efectivo de los escoceses. Hubo cosas que nos gustaron mucho y alguna que nos convenció menos esta vez, os lo contamos y mostramos:

GUN – 15 de Mayo 2024 – Sala Shoko, Madrid

El miércoles 15 de mayo era día de San Isidro en Madrid y la ciudad vibraba de fiesta, con las calles llenas de flores y de chulapos de todas las edades. Al llegar a la sala Shoko, muy justa de tiempo, me uní a la cola cuando una chica me pregunto si me sobraba alguna entrada. Me ofrecí a preguntar al grupo que hablaba en inglés a mi lado y me enteré de que eran amigos de un miembro de la banda de rock que íbamos a ver esa noche, GUN, concretamente el batería, que estaba con ellos. Al ver mi cara de incrédula me mostraron también una foto suya en concierto. Ninguna reacción, que fui incapaz de aceptar que el batería de una banda de rock de alto nivel podría esta en la cola para acompañar a sus amigos al entrar a la sala de conciertos.

Curiosidades iniciales de la velada aparte, GUN vuelven de manera regular a Madrid, donde tienen muchos fans y en este caso estaban presentando el nuevo disco que se llamaba “Hombres”, y llegaban justo para celebrar este éxito con el público español.

GUN:

Las 750 entradas estaban agotadas a la primera hora de la mañana el día del concierto. No me esperaba menos de GUN, una banda de hard rock escocesa con 35 años y pico de existencia ya, que venía de haber tocado los días anteriores en Barcelona, Zaragoza y Valencia, en la gira de su nuevo álbum. Así, su set list es un viaje entre pasado y presente, nostalgia y actualidad, que prometía adrenalina y emoción en el escenario y entre los fans. Después de escuchar el álbum en mis cascos, tan lleno de energía y vida, me hacía mucha ilusión ver cómo sonaba en directo, que ya sabemos que es una experiencia inmejorable.

GUN

A las 21.07 el escenario se llena de un espectáculo de luces mientras resuenan los acordes del clásico Delilah, que hacen que el público se una a la canción con nostalgia. La primera canción, Lucky Guy, del nuevo álbum, empieza relativamente tranquila con coros en directos, para explotar transmitiendo mucha fuerza con el ritmo imparable del batería Paul McManus y el toque personal del bajo Andy Carr. Desde el principio, la voz de la banda, Dante Gizzi se compenetra con el público mientras su hermano, el guitarra Giuliano Gizzi, alias “Jools”, impresiona por su intensidad, acompañada por el contraste entre el guitarra Ruaraidth MacFarlane y el bajo.

Desde sus comienzos en 1987, GUN creció con Jools y poco después se le unió Dante Gizzi, que empezó tocando en la banda el bajo (siendo muy muy joven entonces) para convertirse en la voz del grupo en 2010, año en el cual se unió el batería actual. Andy Carr también lleva muchos años en el grupo y es ya parte de la familia.

Grande fue mi sorpresa al reconocer en el escenario al batería con el cual había hablado y darme cuenta, no por la primera vez, de la modestia que predomina en el mundo del rock bueno, donde el éxito se construye a base del trabajo duro y de una actitud humilde, como Dante y Jools decían en su entrevista en el Podcast Oficial de Celtic FC. (del que siempre han hecho gala de ser grandes seguidores).

Gun

Seems Like I’m Losing You, un hit del album “Swagger” (1994) inicia un viaje en el tiempo, entre pasado y presente, por todos sus álbumes, llenando los corazones de sus fans de nostalgia para escucharlos cantar junto a la banda, seguido por temazos como Here’s Where I am y Don’t Say It’s Over, otro de los clásicos rotundos, donde la voz de Dante con sus tonos ásperos ha dado una nueva vida a las canciones antiguas y les ha aportado sentimiento y alma. La sensación que da la sala llena de fans cantando en inglés es la de un espacio donde la música nos une, en un idioma en el cual todos podemos sentir y ser una gran familia, sin fronteras.

Los cinco miembros de GUN se apoyan, disfrutan de la música juntos, se lucen mutuamente, sin olvidarse en ningún momento de que son una sola alma. El escenario esta en llamas, con los 5 miembros de la banda en sintonía completa, apoyados por un público incansable. De la primera fila tengo la suerte de disfrutar de los solos del guitarra Ruaraidth Mac Farlane, que gana los corazones del público con su energía desbordante, pura música en la sangre. Será el más nuevo de la banda, pero se crece en el escenario y parece llevar años en la banda por el trabajo que está aportando a la banda.

All fired up abre gas y nos devuelve al presente con un subidón de adrenalina y energía, marcando no solo un ritmo joven tan especifico al nuevo álbum, pero también unos tonos de hard rock y metal, haciendo que los fans resurjan de la nostalgia del pasado con una nueva energía que Dante sabe transmitir recorriendo el escenario sin dejar su conexión con los fans ni un momento. Como decía Dante, lo que das es lo que recibes y justo esta noche estaba para mostrar como el amor que das se te devuelve mil veces. O por lo menos de los más de 800 corazones que latían al mismo ritmo de la música de GUN.

Gun

El repertorio de GUN en este concierto asciende al nivel de himnos, con cada fan en la sala cantando la letra entera de canciones como la pegadiza Falling (una de las favoritas de Dante, según dijo en una entrevista). La imprescindible Better Days del ‘89 anima a tener la cabeza bien alta, ya que sabemos que siempre vendran tiempos mejores.

Con Inside Out, la banda llevo a su corazón en la manga, lo que hizo al público aún más entregado, a capella para la banda después del fin de la canción. El hit Steal your fire acabó el viaje al pasado con el mismo subidón de adrenalina con el cual empezó el espectáculo.

Detrás de este apoyo y admiración esta el trabajo de muchísimos años, de épocas de cambio y de crecimiento, de pura pasión y de dejarte el alma en el escenario. ¡Y qué mejor manera de recompensar este apoyo de los fans en España que dedicarles Hombres, el álbum! Dante sabe cómo grabar este concierto en la memoria del público y desaparece un momento para volver vestido de chulapo y hablar de otra pasión que une a hombres de todo el mundo, el futbol, y se gana las ovaciones del público. Como mujer solo puedo decir que espero que algún día GUN dedique un álbum entero a mujeres, para equilibrar la balanza. Y más aún cuando suena por todo lo alto la irónica Big Boys Don’t Cry, que pisa fuerte con la batería, nos doblega con los tonos agudos del solo del guitarra Ruaraidth y se afirma como seña de identidad: “cosecha lo que siembra”.

La famosa versión de Word up inunda el público y las pantallas acompañan al escenario, mientras Dante tiene a los fans entregados moviendo sus manos el aire y cantando al unisón. ¡Qué recuerdos de mi juventud!, y seguro de la gran mayoría del público, con edades entre 40 y 60… Y más cuando llega la preciosidad de Taking on the world (su primer gran éxito de hecho, o al menos el tema, y el disco que les puso en el mapa allá por el 89), liderada esta vez por Dante y Jools, que la dejaron hasta el final del concierto para escucharla en el público, Shame on you y demás.

Gun

Ante el reclamo de un público encendido, la banda vuelve sin bajar el listón y Dante dedica el concierto a un amigo, deseándole que se mejore. Después de unos bien merecidos agradecimientos al equipo (técnico de sonido, fotógrafo, etc.), la versión del Fight for Your Right (to Party) de BEASTIE BOYS deja al público con las pilas puestas para la fiesta después del concierto.

(Final)

Así seguimos después del concierto, de fiesta, en los bares al lado de sala Shoko de donde tuvimos que salir rápidamente, como se nos pidió, después de un magnífico tour de force de GUN de casi dos horas, una carrera contra el tiempo que se queda grabada en los corazones y la memoria de sus fans.

Que mejor manera de acabar la noche que dando las gracias y abrazando a un gran artista que, a su manera personal y humilde, ya estaba en la calle, como los fans de GUN. Paul MacManus, I salute you! Con toda mi inmersión en el rock y metal que me ha dado Madrid en estas dos semanas, por fin puedo decir: gracias, GUN, me he enamorado. ¡Que viva el rock y metal!

Texto: Amalia Martin / Fotos: Mar Fuertes

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